A cuatro años de iniciarse una transformación en los rosales ubicados en El Rosedal de la rambla de Mercedes, hoy se aprecia un verdadero cambio y una floración que invita a admirar las diferentes especies de rosas.
Todo se inició en el 2015 cuando desde la Intendencia le fue solicitado el apoyo al técnico Esteban Erricalde, quien comenzó realizando algunas recomendaciones para que las rosas treparan realmente la estructura del lugar e inició una poda muy severa que en su momento fue severamente criticada por muchos, indicando que eso iba a provocar la pérdida de las diferentes especies de rosas.
Erricalde, recordó ayer con Crónicas que los primeros diálogos los tuvo con Rosemary Symonds e integrantes del Garden, quienes querían recuperar el brillo que en su momento tuvo El Rosedal. Dio apoyo al personal de parques y jardines de la Intendencia, y les fue enseñando a ellos cómo tratar los rosales para lograr el mejor resultado.
El tiempo dio la razón al técnico y hoy se aprecia la sanidad de las plantas y además se ha podido generar un sano contagio del cultivo de la rosa entre el vecino y las diferentes localidades por lo que hoy es común transitar por las Rutas 2 y 21, y poder apreciar en las diferentes viviendas los rosales.
“Todo el trabajo fue de menos a más, la planta necesita el tiempo de madurez y crecimiento, y el clima juega un rol importante en todo esto. Fueron pasando los años, cuando se celebraron los 100 años de El Rosedal, se logra enjardinar dentro del recinto, recibiéndose donaciones de plantas de los clubes Garden y otros lugares del país, y se han colocado en reposición y plantas nuevas unos 400 rosales. La gente se fue apropiando del lugar, se están interesando en el cultivo de la rosa y vemos canteros de rosas en todas las localidades, generándose así la “Ruta de la rosa” y todo esto se genera desde este rosedal que sigue creciendo y al cual aún le falta mucho más para dar. Yo estimo que en 5 años más, el lugar va a estar al 100% como fue en otras épocas. Soriano se está vistiendo de rosas, recuperando así los valores de los inmigrantes porque la historia de la rosa se la debemos a ellos.”